¿En cuál mundo quieres estar?
El mundo se está dividiendo en dos:
Uno es “este” mundo, así organizado por el sistema que ya conocemos.
El otro, un mundo nuevo que se está creando ahora, con un sistema diferente.
Aunque estemos anestesiados, distraídos y muchos sencillamente no quieren saber, lo cierto es que están pasando cosas importantes y pronto pasarán muchas más.
Se acercan decisiones que cada uno deberemos tomar, con mayor o menor consciencia de lo que hacemos, pero inevitablemente estaremos definiendo nuestro destino.
Para aquellos que nunca han querido saber antes, que no tienen idea de lo que estoy diciendo, pero “algo” les resuena, algo les dice que vale la pena enterarse, les dejo una propuesta fácil y amena.
Tómalo como un juego:
Todos miramos series, nadie se escapa de esa costumbre.
No solo se miran para “matar el tiempo”, distraernos, no pensar, no vivir; también podemos seleccionar lo que vemos justamente para “aprovechar el tiempo”, pensar y reflexionar sobre lo que vemos y así poder despertar.
El tema es este:
El mundo en el que vivimos tiene un sistema, una forma de hacer las cosas, tiende hacia un pensamiento único, que nos va llevando a cierto destino previsto, aunque tú no tengas idea de eso.
Hemos sido programados desde niños para vivir en “este” mundo así organizado.
Pero ahora, ya hay muchas personas que se han dado cuenta, hay más despiertos y no están de acuerdo con ese destino del mundo al que el actual sistema nos lleva.
Cada vez somos más los que buscamos otra forma de hacer las cosas, estamos creando otro sistema, otra forma de vivir y lo estamos poniendo en práctica. Se trata de llegar a un mejor destino con nuestros actos ahora.
Es “otro” mundo, organizado por otro sistema diferente, que acabe con el dolor y el sufrimiento, que nos traiga paz y prosperidad.
Ese mundo nuevo es para los que decidan vivir distinto ahora, son la semilla que germinará una vez separado el trigo de la cizaña.
Es una decisión que debe tomar cada uno individualmente.
¿En cuál mundo quieres estar tú?
Para tener claras las opciones te propongo que veas dos series de televisión bien distintas.
Una muestra el futuro o destino de “este” mundo, así como va organizado. Puedes ver cómo son unas pocas personas solamente, las que dirigen “este” mundo y hacia dónde lo llevan. Es la serie televisiva Fallout que puedes ver en Prime. No es para niños, es solo para adultos porque es dura, violenta, aunque verdadera.
Y, por otro lado, una serie que propone otra forma de actuar, otro sistema por el que guiar nuestros actos cotidianos. Una manera de pensar diferente por donde salir de este sistema creando uno nuevo.
Ir creando así un mejor destino, un mundo nuevo sin dolor ni sufrimiento en paz y prosperidad, sin daño ni violencia. Es la serie Los Elegidos que puedes ver en Netflix. Sí es para niños, también para la familia, porque brinda enseñanzas de valor para compartir y elevan la vibración personal.
Jesús de Nazaret, fue el mesías que esperaban los judíos, pero vino para todos.
Dio ejemplo y enseñó a vivir de otra manera, para así crear un mundo nuevo, un mundo feliz, para la próxima generación humana que ya está cerca.
Nos dijo, que ese cambio de ciclo humano o generación, se produciría, cuando las señales nos mostraran que ya se aproximaba el momento. Las señales ya están, los males de siempre son ahora más intensos y hay además males nuevos que nunca se habían visto, por lo tanto, es el momento de ser conscientes de cómo estamos viviendo y hacia dónde queremos ir.
Las señales ya están, hay que verlas, el momento de decidir es ahora.
El nuevo sistema por el que organizar nuestras vidas: ¿De qué se trata?
Veamos, es fácil y simple, como la verdad:
- Cuidar la naturaleza, respetarla y amarla, la Tierra es nuestra casa y dependemos de ella.
- Compasión y respeto por los seres vulnerables, animales, ancianos, niños, minusválidos, etc.
- Alimentarnos con vegetales, semillas, legumbres, cereales, miel, aceite, frutos, hay mucha variedad al alcance, sin tener que hacer padecer a seres que sienten dolor y sufrimiento como nosotros.
- Menos consumismo, necesitar menos cosas, no vivir de apariencias, valorarnos más, amarnos mejor.
- No buscar poseer y acumular, saber compartir adecuadamente.
- Llevar un ritmo tranquilo de la vida
- Buscar tiempos de silencio, introspección, reflexión y conexión
- Tener compasión, empatía con los otros.
- Aprender a hablar con nuestro espíritu, nuestra consciencia, discernir.
- Fortalecer nuestro cuerpo físico adecuadamente, sin excesos ejercitándolo diariamente.
- Descubrir nuestros dones y talentos y aplicarlos poniéndolo al servicio de los demás, una actividad laboral con alegría.
- En suma, Ser buena persona.
Si no es ahora ¿cuándo?
